sábado, 23 de enero de 2016

PARA UN AMOR QUE SE FUE

Es doloroso que a la hora de siempre
ya no estés a mi lado y tu lado este solo
pasa media hora y yo pienso una hora
hay ganas de verte amarte y tenerte
las horas son nubes que lentamente pasan
mis brazos abiertos una sombra abrazan
ya me he vuelto tiempo y también espacio
y en cada llamarada de viento de llamo
Es doloroso que mi voz no escuches
que con mi risa no rías y en mi silencio duermas
y el cortejo de horas hace cola en mi mente
y la verdad parezca una mentira a medias
y te sienta y escuche y  te desee siempre
y la luz de la noche sea aurora desierta
Es doloroso que te mienta y me haga insufrible
mientras el alma me revienta y remedo tu voz
escuchando un eco muy triste como ave herida
y doblego mis piernas y no encuentro respuesta
y la hora de siempre se convierte en mi muerte
Es doloroso refugiarse en la suerte
cuando el amor se marcha y se va de repente
y quedamos a oscuras llorando inútilmente.
 
 
 

HOY LA VIDA DEJO DE LATIR

Hoy la vida dejo de latir
el cielo lloro copos de nieve
y los mares sin olas se secaron
Por cierto mi pensamiento
fue precavido y salvo del tormento
cuanta falta me haces
que has ocasionado
la muerte y destrucción
borrando recuerdos
formando valles de olvido
y camino entre hojas 
 ayer arrancadas
entre flores muertas
entre el llanto
que ahora riega la tierra
Me haces falta para reconstruir
todo lo que borro tu ausencia
Mi pensamiento no es suficiente
las sombras han penetrado mi alma
Cuanto puede hacer una mujer amada
pero nada hará cuando ella no ama
Hoy la vida se me extingue
como incendio inacabable
que arrasa con todo
hasta convertir la vida en nada
hasta dejar llorando al tiempo
convertido en niño triste y huraño
Mañana no habrá mañana
Tu latirás en otra vida
bajo un cielo de doradas estrellas
los mares volverán con sus olas
y las flores recobraran sus colores
y las hojas circularan tu sangre.
 

Espero de la vida una caricia
una mirada sonriente afable
espero humildemente
dormir entre canciones
y despertar sin dolor ni desencanto
Espero de la vida lo mejor
son deseos que nacen de mi alma
y se van diseminando en la verdad
aquella compañera inexorable
que me visita siempre como ahora
Espero no recordar jamás
mis horas juveniles
sin libros ni café mis soledades
quizá fue dura mi batalla
tal vez no se por qué luche
pero aquí estoy entregándole a la vida
las inmensas amarguras que pase
Espero que algún día no hallan tristes
que el amor y la alegría sigan juntos
y una nueva luz alumbre al mundo
como una cruz en el camino que encontré.


Mi sendero esta empapado
de llanto lluvia
semejante a los inviernos
de la sierra desolada
esta cortado en trizas
en plenilunio
y huele a fruta fresca
de invierno solitario
Mi sendero es mitad de cielo
y tierra congelada
bañado de neblina y desconsuelo
se halla perdido entre mis sueños 
y a mi paso palpita el alma
de mi tierra peruana
Mi sendero reconcilia el dolor
con la esperanza 
y se alumbra de la fuerza
de los cóndores que pasan
y reposan majestuosos en los andes.

 

 

 

Quiero que estés satisfecha de mi

que poco a poco me agotes
que me desesperes y me acabes
Mi tiempo te pide más mucho más
como la tierra sedienta pide agua
como el cielo borrascoso pide lluvia
yo te pido que me conviertas en gota
no tengas miedo ni escrúpulos
no te arrepientas que el placer se agota
siente tu tiempo y saca más ternura
piensa que algún día no habrá más esta aurora
caminame pueblame de sueños
sacrificame en tu hoguera 
y derrama mi sangre en tus entrañas 
y concedeme la libertad
porque a fuego lento muero
hasme volar como los cóndores
por las montañas de tu historia
y sujetar mis garras 
en la superficie de tu cuerpo
donde los limites no existen 
y tu pasión es infinita
y mi libertad se ha perdido en la celda
de tus senos turgentes
cuya lava hace arder lo que queda de mi.
 

 
 
 
 

Soñé como ahora 
y no encuentro respuesta
sombrío el camino
y dispersa la siesta
Habían umbrales 
y rostros seniles
había unos campos
y madres austeras
cantando a la siembra
y yo suspirando 
en la punta de un cerro
sin pena ni gloria
fugué de mi historia 
baje hasta un muelle
rodeado de escoria
y mi mano izquierda 
sostenía al mundo
pero era un sombrero
 sin una cabeza.